
El mundo entero es testigo de las catástrofes ocasionadas por la intervención humana. La pandemia, incendios y huracanes marcan un 2020 turbulento. Ahora la ciudadanía exige la investigación de culpables por las quemas en la provincia central de Argentina.

En Córdoba el fuego ya arrasó con más de 190 mil hectáreas. Hasta ayer había dos focos activos y hoy bomberos se dedican a controlar puntos calientes.
Buscar el origen de un incendio es prácticamente una imposibilidad.
La naturaleza suele encubrir el comportamiento delictivo de una persona que inicia un fuego luego extendido por toda una provincia.
Pero en Deán Funes, ciudad al
noroeste de Córdoba, hay pruebas que permiten hacer justicia. La Fiscalía de
Instrucción ordenó la prisión
preventiva de dos personas que estaban detenidas desde agosto e imputadas bajo
el delito de incendio calificado y entorpecimiento funcional.
La dependencia a cargo de Fabiana Pochettino los acusa de
haber iniciado intencionalmente una quema que se descontroló y dañó miles de
hectáreas, la fauna, flora y salud humana.
En la resolución dictada ayer se destaca “el total desprecio de los acusados por la vida y los bienes de las personas, como así también del medio ambiente y la naturaleza”.
Además señala que “toda vez que se trata de
personas conocedoras de la zona y de las especiales condiciones climáticas que
imperaban en el momento del hecho, lo que les hacía prever el riesgo de su
accionar, sin perjuicio de lo cual ocasionaron una catástrofe de inmensas
proporciones”.
La intervención humana, la sequía, el calentamiento global y
la impunidad hicieron que actualmente se incendiaran 190 mil hectáreas solo en
la provincia de Córdoba. Resta esperar el desenvolvimiento de la causa y la
adjudicación de culpas.