
Después de meses de hablar de quemas intencionales, focos reactivados y bomberos incansables, las portadas de medios parecen olvidar que siguen vigentes. Pero el riesgo sigue siendo alto en varias provincias argentinas y en el mayor humedal del mundo.

Índice de peligro de fuego según el Servicio Meteorológico Nacional para hoy lunes 5 de octubre.

Focos de incendio en el Pantanal (Fuente: Nodal).
En el Delta la situación
se controló pero en Córdoba sigue siendo muy alto el riesgo. Mientras tanto en
el país vecino de Brasil la reserva ecológica sufre pérdidas incalculables.
Además en Argentina
se registran incendios activos en las provincias de San Luis, Jujuy, Catamarca,
Misiones, Salta, Tucumán, Formosa y Chaco.
Córdoba
De acuerdo a la información
actualizada a primera hora, el fuego continúa activo en las regiones de Río
Cuarto y Cruz del Eje.
500 efectivos se
desplegarán en las zonas afectadas junto a los aviones hidrantes y helicópteros.
Ayer, el trabajo se
concentró en el sur de la provincia, en zonas de Las Albahacas, El Chacay,
Achiras y Huerta Vieja, en donde hay un pinar en actividad, con 223
bomberos y la asistencia de dos aviones hidrantes.
En el otro incendio
de grandes proporciones el trabajo estuvo a cargo de 260 efectivos desplegados
en jurisdicción del departamento Cruz del Eje, en un
amplio sector que comprende los poblados de Oro Grueso, Cantera del Blanco,
Cruz de Caña y Camino a los Caracoles.
En estos sitios del
noroeste cordobés combatieron el fuego bomberos voluntarios de la provincia de
Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos y la brigada que envió el Plan Nacional de Manejo
del Fuego, con el apoyo de seis aviones hidrantes.
Fuente: Prensa del
Gobierno de Córdoba
Delta
La región del delta del río
Paraná abarca una superficie aproximada de 17.500 km2 y se extiende a lo largo de tres provincias: Buenos
Aires, Entre Ríos y Santa Fe. Es una zona de
gran interés ecológico y biogeográfico, donde predominan los ecosistemas de humedal.
En las islas del delta se
produce desde hace años un fenómeno conocido como “pampeanización”, esto es, el traslado a estos humedales de una serie
de actividades productivas propias del bioma de pampa húmeda.
Estas actividades,
desplazadas de esa zona central por la generalización de actividades de mayor
rentabilidad –como el cultivo de soja–, ocasionan un complejo proceso de cambio
de uso del suelo, que impacta sobre los
ecosistemas, los bienes naturales y la salud de la población del delta.
En el transcurso de 2020, en el contexto de una bajante histórica del río Paraná, que generó mayor cantidad de suelos secos en el humedal, se registraron más de 8000 focos de incendio, la mayor cantidad en los últimos nueve años, exponiendo, otra vez, la persistencia de este grave problema socioambiental.
Fuente: Ministerio
de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación
Pantanal
Sólo en septiembre hubo 164
focos de incendios en el humedal más grande del planeta. En agosto, más de 200.
Aldeas, casas y cultivos se
destruyeron y hasta provocaron hospitalizaciones de personas por problemas
respiratorios.
Según una investigación de
Agência Pública con los datos del satélite del Instituto Nacional de
Investigaciones Espaciales (INPE), los lugares que más daños sufrieron fueron
por focos de incendios originados en propiedades privadas que luego saltaron a
las tierras indígenas.
Fuente: Nodal