Más allá del 1% de la población celíaca, espaguetis, ravioles y canelones no tienen por qué eliminarse. Así lo demostró una investigación.
Aquí va un argumento a favor del trigo y sus derivados, siempre y cuando sean consumidos en equilibrio y complementados con otras opciones naturales e integrales.
Hasta hace pocos años, solían eliminarse todas las variedades de pastas de las comidas diarias si el objetivo era la disminución de peso.
Sin embargo, año a año la perspectiva nutricional ha evolucionado y ya no se enfoca en eliminar sino en buscar lo equilibrado y saludable.
En este contexto, se publicó un
estudio en la revista Frontiers in Nutrition de Estados Unidos que descubrió que:
- Cuando se incluyen pastas, las personas tienen una
mejor concentración y variedad de nutrientes esenciales. - No existe una correlación entre el consumo de este alimento y los niveles de sobrepeso y obesidad en niños y varones adultos.
- Mujeres adultas que consumen pasta tienden a tener mejores valores de circunferencia de cintura, peso corporal e índice de masa corporal que aquellas que no.
- Quienes no incluyen estas comidas, tienden a consumir más grasas saturadas y azúcares.
No obstante, debe ponerse en consideración que la investigación es auspiciada por la Asociación Nacional de la Pasta cuyos intereses se alinean con los resultados.
Al margen, el estudio es otro argumento a favor del trigo y sus derivados, siempre y cuando sean consumidos en equilibrio y complementados con otras opciones naturales e integrales.