Lo que se veía como un desplazamiento simétrico de la cola de un lado a otro, en realidad es una ilusión óptica. Un estudio reciente develó cómo funciona realmente y es prometedor para el tratamiento de infertilidad.
A través de uno de los primeros microscopios inventados, Antonie van Leeuwenhoek observó el movimiento de los espermatozoides masculinos hace más de 300 años.
Sin embargo, lo que vislumbró como un desplazamiento simétrico de un lado a otro, en realidad es una ilusión óptica.
Esto concluyeron los investigadores Gadelha (Universidad de Bristol), Corkidi y Darszon (Universidad Nacional Autónoma de México) gracias a los modernos microscopios 3D y publicaron sus descubrimientos en la revista Science Advances.
Lo que a simple vista se ve como 2D es estrictamente una
compleja e irregular ondulación 3D.
"La simetría se logra así a través de la asimetría, creando la ilusión óptica de simetría bilateral" indica el
estudio.
La cola del espermatozoide sólo se mueve torpe hacia un lado. Pero para compensarlo y no nadar en círculos, la cabeza gira en la misma dirección que nada.
En física el concepto se denomina precesión: es lo que también explica el balanceo de la Tierra conocido como "precesión de los equinoccios".
¿Qué significa el descubrimiento? Las conclusiones proporcionan nuevas vías de investigación sobre la reproducción humana.
Dado que la infertilidad está principalmente ligada a problemas masculinos, la comprensión plena de su funcionamiento desbloquea nuevas herramientas para el diagnóstico y tratamiento de espermatozoides no sanos.